Cultura
El país ofrece la posibilidad de descubrir la diversidad étnica de su cultura, a través de sus ciudades emblemáticas como Marrakech, Fez y Essaouira, donde sus centros históricos o medinas están reconocidas como Patrimonio Mundial por la UNESCO. Otros puntos de interés que no puedes perderte son Chefchaouen, conocida como la “Ciudad Azul”; o Tetuán, con sus históricas mezquitas y zocos. Los riads, casas tradicionales convertidas en hoteles, son el alojamiento perfecto para que tu cliente experimente una auténtica inmersión cultural.
Deportes
Marruecos ofrece a los amantes de deportes al aire libre una mezcla perfecta de aventura y relax, destacando el surf en sus costas atlánticas y el golf en sus campos de renombre mundial. El pueblo pesquero de Taghazout es ideal para los surfistas, mientras que Marrakech alberga campos de golf con espectaculares vistas a las montañas Atlas, en especial el Royal Golf de Marrakech y el Palmeraie Golf Palace. Sin olvidar las numerosas rutas de senderismo que ofrece el país, especialmente la ascensión al monte Toubkal.
Gastronomía
La cocina marroquí es una fusión de sabores influenciados por la rica historia del país. Destacan los platos como el cuscús, preparado de diversas formas; tajine, un guiso con albaricoques y almendras; pastela, hojaldre relleno; y la tradicional sopa harira. En los mercados locales o zocos, se encuentran especias, frutas y dulces como tortas de miel y almendras. Degustar el icónico te de menta, omnipresente en la cocina marroquí es algo que no se pueden perder.
